Por: Alejandro Barbosa Valderrama. Especial para www.fortindelcaballero.com
Fotografía por: Fernando Gómez González
Crédito foto Buitres: Leo Barizzoni
Tener una banda de rock para los artistas que hacen parte ella es un compromiso, se deciden a tocar cuando hay pasión y realmente deben tener gusto por lo que hacen en un escenario. Esa premisa la tienen clara las agrupaciones que llevan una historia de muchos años. Aquellos músicos que para nosotros como fans y seguidores se vuelven por sus trabajos de estudio y trayectoria en vivo: leyendas o dioses en nuestro olimpo. Es el caso de agrupaciones como la que lidera Doro Pesch actualmente como solista. Esta mujer desde sus inicios en WARLOCK y SNAKEBITE sabia el por qué se iba a dedicar a este oficio.
Esa energía, entrega y carisma que también tienen músicos que seguimos y amamos como Rob Halford de JUDAS PRIEST, Bruce Dickinson de IRON MAIDEN, Klaus Meine de SCORPIONS, Ian Guillan de DEEP PURPLE o UDO DIRKSCHNEIDER, la mantiene viva e intacta DORO que en el escenario BIO nos devolvió en el tiempo como si se tratara de abordar el DMC DeLorean de ‘Volver al futuro’, para revivir esos sentimientos de una gran época que fue los 80s con el Heavy Metal y sus protagonistas. Esta guerrera del metal ha liderado un movimiento que como todos sabemos siempre ha estado dominado por el género masculino y ha sido un verdadero ejemplo a seguir para los mismos músicos y fanáticos de la escena.
Con mi fotógrafo siempre en acción iniciamos este viaje legendario con el sonido arrollador de Doro Pesch, un auténtico huracán con sus 60 años que no se le notan. Hay que verla como se mueve en la tarima, el poder de su voz y el trabajo con Bill Hudson en la guitarra, Johnny Dee en la batería, Stefan Herkenhoff en el bajo y Bas Maas en la otra guitarra dejaron estupefactos a todos los que en esta noche vibramos de principio a fin con el set list de esta gran formación musical. Canciones como: “Rule the ruins”, “Burning the witches”, “Fight for rock” de sus pasos con WARLOCK mostraron el poder de la eterna reina del Heavy Metal mundial. A su turno “Time for Justice” que es un poderoso llamado a la acción y a la reflexión sobre la necesidad de justicia en el mundo. Desde el inicio, la letra nos presenta una visión sombría del futuro, lleno de mentiras y consecuencias inevitables.
La frase ’I see a future full of lies’ sugiere una desilusión con el estado actual de las cosas y una advertencia de que todos pagaremos el precio de nuestras acciones. Este sentimiento de urgencia se refuerza con la declaración de que ’It’s never right and much too late’, indicando que, aunque es tarde, aún es posible hacer cambios significativos si se conoce la verdad.
El repertorio continuó con “Raise Your Fist in the Air” ya en ese momento se podía sentir una perfecta comunión entre los asistentes y una de las protagonistas de la noche en este escenario. “Children of the down”, “Metal Racer”, Für immer, estas dos como covers de WARLOCK también con los puños en alto de la audiencia. Luego "Fire in the Sky”, una introducción de la banda al clásico “Breaking the Low” de JUDAS PRIEST, con una impecable interpretación de los músicos de Doro.
Finalizaron con “All we Are” de su época con WARLOCK que todos coreamos sin cesar. Era como un matrimonio entre ella y sus seguidores. Algo que sólo se puede expresar con el ímpetu y la pasión que produce la magia de este himno del metal. Nos regalaron también “All for Metal” y ella sonriente. Se podía sentir su felicidad con el público bogotano. Desde backstage se escuchaba el arrullo de su voz con notas de “Living after midnight”, otra de esas gemas de JUDAS. Describo este momento como maravilloso porque no cabe otra palabra para este cierre de uno de los mejores espectáculos y noches de nuestras vidas. Eso compartimos con algunos presentes con palabras llenas de emoción por lo vivido aquí en este domingo lluvioso pero épico en su contexto.
Con respecto a cada una de las agrupaciones que pudimos ver en el Parque Simón Bolìvar durante este segundo día del festival resalto el trabajo de BUITRES de Uruguay. Son años de constancia de pisar tarimas de distintos puntos de Latinoamérica y el mundo con arraigo. Las melodías traen consigo mucho rock, blues y punk y muestran a cinco amigos charrúas que la pasan bien en el escenario. Lo disfrutan de manera divertida y eso contagia a su público. Temas como: “Buitres”, “Mincho bar”, “Milonga rante”, “Ojos” y “Canción de cuna” exaltan el amor, el desamor, la rebeldía y el existencialismo. Gran banda hermana con su sonido heredado de Los Estómagos y de su experiencia en medio de la dictadura, cuando no era bien visto el rock y menos tener una banda.
Otro de los grupos que pudimos apreciar con detenimiento fue STAYWAY, con su mezcla de rock alternativo. La trayectoria de esta banda incluye haber compartido tarima con gigantes como AEROSMITH y DISTURBED. Un sonido fresco pleno en composición y melodía de su líder Diego Abril que nos muestra toda su faceta como productor en vivo. Los temas que más impactaron a los espectadores fueron “Animal” y “Hostil” que en su letra es una dedicatoria a los barrios más pesados en su realidad social como Ciudad Bolìvar, Usme, Soacha, patio Bonito y Kennedy, entre otros que son complicados pero también se hacen querer por su historia.
Y de nuevo emergió con fuerza la leyenda del rock colombiano
En lo que respecta a KRAKEN y su presentación en la 28 edición del festival esta vez quise realizar el ritual de nuestro mago y mentor Elkin Ramírez cuando componía y escuchaba sus álbumes y fue cerrar los ojos por un momento y dejarme llevar por una introducción que me evocó los tiempos de los barcos piratas que asaltaban los buques españoles con “El Viejo Galeón”, tema incluido en el álbum ‘Humana Deshumanización’. ¡Las imágenes de video de los barcos en su proa y el inicio con Civiliza! ¡Civiliza! Civiliza! Civilización. Todos a estribor. Todos a babor fueron el preámbulo de una presentación llena de muchos ingredientes.
Por un lado, Roxana Restrepo que es para este servidor una de las voces más importantes actualmente de nuestro rock nacional. Por algo hace parte de la alineación actual de KRAKEN. “Fugitivo” del primer álbum me puso ante los años de juego de mi papá que no fue nunca una situación fácil de superar por mi familia y mucho menos mi mamá. Ya alguna vez lo había conversado con el titán. Ese tema es la realidad de muchos que no pueden escapar a sus adicciones en especial el juego. Con mis hermanos en una época siempre la cantábamos en casa como la mejor manera de exorcizar nuestros propios demonios de esa difícil realidad. Ya mucho tiempo después vendría el abrazo y el perdón definitivo.
En lo que refiere a lo musical Ricardo Wolff acompañó a Roxana en los coros de este tema y en algunos más como “Escudo y Espada” mostrando ese soporte que el segundo guitarrista siempre ha dado a la banda. Luis Ramírez se destacó por su experiencia en el bajo y esa locura que siempre lo ha caracterizado y hemos reseñado en nuestro portal se hizo presente como es costumbre. Su larga cabellera no dejaba de ondear en cada una de las canciones. Un músico honesto y dedicado que por años ha puesto su trabajo y aporte de escuela en la banda. Julián Puerto con su batería y un trabajo impecable. Nunca abandonó y fue leal siempre. Por eso se resalta ese poder que emana con sus baquetas, bombo, redoblante y tambores. Es un músico de amplio valor en tarima.
Andrés Leyva virtuoso, señor de la guitarra también se destacó y nos puso a vibrar de nuevo con sus notas que se unieron al feroz grito de Roxana en cada cierre. ¡Estás listo! ¡¡Regálame tu puño arriba!! Es increíble los sostenidos que ella logra y el respeto que siempre muestra en la tarima por el papel que ocupa. Ella habló de los nuevos retos y rumbos de ésta, la mejor banda de nuestro país. Se escucharon algunos temas de su más reciente producción musical Kraken VII Los Pasos del Titán, en los cuales destaco el aporte de letra y composición de Ruben Gelves, tecladista como “El Silencio de Marfil”, un excelente tema contestatario. Sonaron también: “Hombre Mito, Hombre Leyenda” y el tema homónimo dedicado al titán Elkin Ramírez: “Los Pasos del Titán”. De KRAKEN VI y con una magistral interpretación de Roxana los temas: "Flores de Trebol" y "Sobre esta Tierra. Un poema esta canción que muchos acompañamos en esta mágica cita con KRAKEN: "Mi pueblo huele a café, a sangre fresca, poema y yelmo. Me lo encuentro por doquier, a veces triste, cansado y lento..." Enormes en el escenario. Y el público de esta noche aplaudió y reconoció que esta nueva ruta va por un excelente camino y merece todo el apoyo. Un sonido más pesado, hasta con algo de Thrash Metal y Power Metal en algunas melodías sumado al rock progresivo que siempre ha marcado el sendero de la agrupaciòn.
Un verdadero viaje de titanes el que vivimos este domingo con KRAKEN y DORO en el cierre de este gran día 2.
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