Fotos: Cortesía Alejandro Saga / John Gómez (Brutalizer Media & Events).
Seis años después volvió a Bogotá Cradle of Filth. Esta vez lo hizo para promocionar su más reciente trabajo DARKLY, DARKLY, VENUS AVERSA. El sitio para el evento fue el Teatro Metropol. Domingo 12 de diciembre de 2010.
En el 2004 Cradle of Filth tocó en el Coliseo el Salitre. No muy buenos recuerdos se tienen de ese concierto. Por el sitio (Pésima acústica), por el sonido y por los gases lacrimógenos que la policía lanzó cuando el toque ya había terminado. Si a eso se le suma que para ese momento el grupo estaba lejos de ser el que grabó trabajos memorables como THE PRINCIPLE OF EVIL MADE FLESH o DUSK AND HER EMBRACE, por citar sólo dos, el temor a repetir eso era inevitable (Lo del sonido).
Para sorpresa de muchos, incluyendo a quien responde por estas líneas, esta segunda presentación fue mucho mejor que la primera. Si bien a Dani Filth se le asoma una barriga cuarentona, su poder vocal no se ha diezmado demasiado. Infortunadamente el sonido por momentos traicionó las buenas intenciones del vocalista, quien pese a eso, salió airoso y demostró que Cradle of Filth es una banda de mucho respeto, así muchos creamos que le han bajado volumen a su música y que, lo que inicialmente era un contundente Black Metal, hoy es una fusión que termina generando confusión al momento de clasificar al grupo.
La banda encargada de abrir fue Avalon. Death Metal melódico bien ejecutado. Lo más notorio de su presentación fue la versión del clásico de los suecos Therion “In the Desert of Set”. Bastaron unos pocos minutos para que Dani Filth y sus músicos se posesionaran del escenario y empezaran a descargar Metal. Lo hicieron con “The Cult of Venus Aversa” del nuevo trabajo. Unos pequeños problemas de sonido no dañaron este gran comienzo, para dar paso a “Honey and Sulphur” del GODSPEED ON THE DEVIL’S THUNDER, ya el sonido no molestaba tanto. Cada uno de los músicos en lo suyo: Martin Skaroupka en la batería no nos hacía extrañar a Adrian Erlandsson, en la guitarra rítmica James Mcilroy, en el bajo Dave Pybus, en el teclado la enigmática Ashley Ellyllon y en la guitarra líder su eterno coequipero Paul Allender. No cabe duda de que la garganta de Dani Filth es prodigiosa. Cambia de tonos como muy pocos lo pueden hacer. Siguió “Her Ghost in the fog” del MIDIAN. De nuevo al DARKLY, DARKLY, VENUS AVERSA, “Lilith Immaculate”. Ya el público empezaba a sentir que el grupo le debía temas clásicos, sin embargo, vino otro tema no tan viejo, no tan nuevo “Nymphetamine” del trabajo homónimo, apenas para calentar el ambiente y demoler con la siguiente canción “The Principle of Evil Made Flesh”, tema que también le da título al mejor disco de su carrera. Un breve descanso con “Under Huntress Moon”, del THORNOGRAPHY. Acto seguido “Dusk and her Embrace” de ese gran disco titulado igual.
La velocidad y pesadez disminuyó con lo que siguió “Forgive Me Father (I have Sinned), primer sencillo de su más reciente cd. El turno ahora era para “The Twisted Nails of Faith” del CRUELTY AND THE BEAST, trabajo conceptual dedicado por completo a la condesa Elizabeth Bathory. La banda se retiró por un par de minutos, los necesarios para tomar un segundo aire y atacar con el “Ave Satanis”, el intro de “Cruelty Brought Thee Orchids” del mismo CRUELTY AND THE BEAST. Luego nos recordaron el VEMPIRE con “Ebony Dressed for Sunset”. La recta final de la noche no pudo ser mejor, el maravilloso “The Forest Whispers my Name” de su mejor disco y el cierre definitivo “From the Cradle to the Enslave” del EP del mismo nombre. Gran final.
De Cradle of Filth se pueden decir muchas cosas, unas buenas, otras no tanto, lo cierto es que sobre un escenario demuestra que su reputación se la ha ganado a pulso, peleando codo a codo con otros grupos por conservar el lugar que se ganó desde hace varios años. Es una de las agrupaciones más reconocidas –Léase comercial- dentro de la escena metalera mundial. Del PRINCIPLE OF EVIL MADE FLESH pasando por el MIDIAN hasta el DARKLY, DARKLY, VENUS AVERSA, hay tanta diferencia musical, que hasta los más fieles seguidores del grupo no entienden cómo Dani Filth pasó de su larga melena negra por unas rastas azules hasta el pelo corto que luce hoy día. Los mejores días de Cradle of Filth ya pasaron, pero eso no les resta grandeza a estos ingleses que hace casi 20 años entendieron que el Metal es el más lucrativo negocio de la música, aunque muchos así no lo entiendan…
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