Una madre entregada a su hijo de 4 años de edad, una luchadora incansable, una fan de la vida y de su pasión el rock y el metal, hoy quienes la conocieron en la escena del Rock en la localidad de Suba, lloran con rabia su absurda e inesperada partida, algún canalla, alguien cobardemente le arrancó la vida, la alejó de su hijo y su familia. Lamentablemente no se conocen los móviles de este infame crimen, su cuerpo fue encontrado el pasado 13 de Septiembre.
Levantemos nuestra voz de protesta, la violencia, la envidia, el rencor, la inhumanización que estamos viviendo, la intolerancia nos invade, hasta cuándo tendremos que ver hijos llorar a sus madres tan prematuramente? A caso quitar la vida de otro se justifica por cualquier motivo o medio? El arte es un canto a la vida, a la creación, no al odio, a pesar que se le cante a lo oscuro, a la muerte, a lo enigmático y a veces a lo sacrílego, no podemos tolerar vivir en un mundo salvaje donde nadie tendría el derecho a vivir.
Desde el Fortín del Caballero damos un saludo de aliento a su familia, especialmente a su esposo y su hijo, esperamos que este crimen no engrose las listas de impunidad en nuestro país.
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