Por: Alejandro Barbosa Valderrama. Especial para www.fortindelcaballero.com
Fotógrafo: Juan Duarte.
Como si se tratara de una reunión de un ejército de heavies antes de salir para el campo de batalla, en una épica historia medieval, miles de fanáticos se apostaron en el Teatro Royal Center para aguardar la llegada al escenario de WarCry, una banda que por tiempos de pandemia estuvo disuelta un tiempo. De ahí que Víctor García hiciera parte del proyecto Adventus durante ese receso, sin dejar de cantar. Muchos ansiaban el regreso y después de mucho esperar con ese fervor que caracteriza al seguidor de los asturianos, el 8 de enero de 2022 sonó el cuerno y las hogueras se prendieron para anunciar a sus clanes del mundo el retorno esperado con el álbum "Daimon" en octubre de ese mismo año. De ahí la gira por Colombia en 2023 que condujo a doncellas, caballeros, reyes y magos a celebrar con furor cada uno de los himnos de batalla de nuestros héroes del metal.
Antes de la salida de los españoles al escenario, se presentaron dos músicos importantes del rock colombiano. Daniel Zapata de Ekhymosis y Mateo Acevedo. Dos apuestas acertadas de la organización del evento que fueron ovacionados por la concurrencia por su técnica vocal y manejo del público.
Daniel Zapata ya habia estado en el show de Pereira y se fajó con canciones propias como "Vuelvo a caer" y "Callar y temer", "El amor de mi vida" de Camilo Sesto, Elkin Ramírez de KRAKEN al interpretar "Silencioso amor" que fue aplaudida sin parar por los presentes y "Solo" de Ekhymosis que muestra la impronta que le da actualmente este músico a la banda paisa al rescatar sus sonidos de la vieja escuela del Thrash Metal. Con un tono jovial recordó a los asistentes también que él tiene un restaurante en la Perla del Otún. La audiencia le devolvió su atención con un aplauso y aguardaba con paciencia la salida de WarCry.
Acto seguido Mateo Acevedo recordó a la concurrencia porque él participó con su voz en el programa Yo me Llamo al representar a Bon Jovi. Comenzó su presentación con el himno "Livin’ on a prayer". Una excelente decisión dado que por cambios en la logística solo pudo presentar su repertorio como acústico con su guitarrista Alejandro Escovar y debia arrancar con un tema bien arriba. Luego sonarían "Sweet Child On Mine" de Guns n’ Roses, "Lejos de ti" una recordada balada de su etapa con Fireangel, "Eres la esencia" de su álbum Mateo Acevedo Band dedicado a la mujer, "Más que nunca", una sorpresa que hará parte de su próxima producción discográfica que gusto bastante por el poder melódico que encierra "Vestido de Cristal" de KRAKEN en el que pidió un aplauso para Elkin Ramírez por lo que representó para el rock colombiano con su legado y "Highway to Hell" de AC/DC que elevó la temperatura del público ávido de recibir a WarCry en el show principal.
Un momento de silencio para que luego el logo de WarCry comenzara a girar. Luces!! Humo en el escenario para desatar los gritos sin cesar. Como si se tratará de salir a galope rumbo a una batalla épica. De fondo la intro de "A por ellos". Adelante! "Vamos a por ellos. Convirtamos su vida en un infierno". El público dejó escapar toda esa emoción contenida para corear a todo pulmón esta canción de Daimon. Rafael Yugueros marcó el sendero con las baquetas. Roberto García en el bajo, Pablo García en la guitarra se unieron al deseo de volverse uno con el público, Santi Novoa cómplice con la magia de sus notas del teclado y Víctor García ese líder indomable que con su voz y movimientos en tarima puso a saltar a cada uno de sus guerreros. Adelante! Siempre adelante. Os digo!!! Eh! Eh! Eh! Eh! Nadie paró de acompañar el coro y todo fue fiesta. Un regalo para el alma.
El fuego se avivó con "Que se vaya" tema también de Adaimon con ese deseo de salir del encierro del invierno. Agitación con el aliento sin parar de todo el auditorio. Eh! Eh! Eh! Sin cesar entre palmas con la letra de esta canción seguida al pie de la letra. Eso encierra el power metal de esta excelente banda española. Poder, adrenalina y pasión para quienes se reunen a vivirlo en un concierto.
Cada canción es un himno para sus fanáticos. Así siguieron con "Nuevo Mundo" de Dónde está la luz?
"Y soy semilla de ilusión
Culpable de traición
Si caigo en el camino.
Soy el pájaro de luz
Que quiere escapar
De un triste destino.
Y a mi tierra no puedo volver...
Lo que me pudo dar, me lo dio.
He dejado hijos y mujer
La esperanza de mi gente soy yo.
Quien me cierre los caminos
Que se pare a pensar
Que lucho por los míos
Y no puedo abandonar.
No hay marcha atrás..."
El elixir de cada composición hace que se sienta el valor de pagar una entrada por ver a la banda que siempre ocupa un lugar en el corazón de cada uno con la poesía épica de su autor. "Rebelde", "Contra el viento", "Desde el dolor", "Alma de conquistador", "Siempre" y "Para siempre". Porque el destino lo permitió. Un momento que se atesora por lo especiales que son los músicos de WarCry en cada versión que realizan de su música.
La seguidilla de clásicos continuó... "Cielo e Infierno", "Ardo por dentro", "Ego", "Coraje" siempre acompañadas de fondo por los videos que las inmortalizaron. En el caso de "Coraje" al recordar el temple y la valentía de Espartaco que estuvo cerca con su rebelión de esclavos de derrumbar al imperio romano. Tema tras tema coreado sin desmayar. Todo era una comunión de heavies en el teatro. Así siguieron las canciones: "Quiero oírte", "Cobarde" que cuestiona a aquellos que le pegan a una mujer, "Condenado", "Devorando el corazón", "Capitán Lawrence", "Tú mismo", "Sólo sé", "La Maldición del Templario", "La vida en un beso", "El guardián de Troya" y "Hoy gano yo". Todos con títulos de libros e historias cercanas al ímpetu y personalidad de cada uno de sus músicos.
Al final entre ovaciones, palmas, sonrisas, lágrimas y agradecimiento por su venida a Colombia le regalaron a la capital "Nana" en versión acústico. Un tema especial que fue el culmen del show y dejó las mejores impresiones además de la energía por las nubes como expresó luego Víctor García en sus redes sociales. Viva WarCry!!!! Nunca fallan!!! Se podía oir a la salida el sentimiento de sus seguidores.
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