Por Alejandro Barbosa Valderrama, El Caballero del Rock Fotografía: Janis Clair.
Fortín del Caballero – 23 de octubre de 2025, Ace of Spades, Bogotá
Bogotá volvió a vibrar el pasado jueves 23 de octubre de 2025 con una cita legendaria para la escena del folk y power metal: el encuentro entre Arkhanon, orgullo de la capital colombiana, y los españoles Celtian, quienes visitaban por primera vez el país para presentar su aclamado álbum Sendas de Leyenda.
El escenario elegido, Ace of Spades, se convirtió en un templo de melodías ancestrales, luces etéreas y una comunión inquebrantable entre músicos y público.
Desde los primeros acordes, la energía fue creciendo como una ola imparable que envolvía cada rincón del recinto.
La noche comenzó con la presentación de Arkhanon, banda bogotana con más de 15 años de historia que ha sabido mantener intacto su espíritu épico y su fuerza creativa. Con un sonido limpio, potente y emocional, ofrecieron un recital que dejó a sus seguidores en trance.
Desde la intro “Sonata Prophetia”, quedó claro que la banda había preparado un espectáculo a la altura de los grandes escenarios europeos.
El setlist fue un recorrido por su universo mítico:
“Astral”, “El Séptimo Sello”, “Temple de Acero”, “Gladiador”, “Sin Miedo al Dolor”, “Cazador de Demonios”, “Nosferatu” y el majestuoso cierre con “Ave Fénix”.
Cada canción fue interpretada con una entrega total, con un sonido trabajado al detalle, un despliegue visual envolvente y una interpretación vocal que reafirmó a Nicolás Herrera (Arkhanon Vanhelsing) como uno de los grandes vocalistas del metal colombiano.
La banda se completó con Camilo Albino en guitarra, Diego “El Santo” Santofimio en bajo y voz extrema, Leo Reyes en batería —quien se lució con un solo demoledor— y José “Ukoriad” San en teclados, tejiendo atmósferas celestiales.
El público respondió con ovaciones y puños en alto, coreando cada tema y reconociendo la madurez de una agrupación que no teme evolucionar.
Arkhanon mostró que el metal nacional puede ser profundo, espiritual y técnico, sin perder el fuego guerrero que lo caracteriza.
Su presentación fue una cátedra de sonido y narrativa, un viaje entre historia, mitología y épica contemporánea. “Ave Fénix” cerró con majestuosidad, dejando al público preparado para recibir a Celtian con toda la energía acumulada.
Cuando las luces se atenuaron y la bruma invadió el escenario, comenzó el momento más esperado: Celtian aparecía por primera vez ante el público colombiano.
Desde su llegada, se percibió que no sería una simple actuación, sino un ritual musical lleno de belleza, técnica y emoción.
Guiados por la imponente voz de Xana Lavey, la banda española desplegó un folk metal poderoso, lleno de matices, melodías celtas y un magnetismo escénico que atrapó a todos desde el primer instante.
Su presentación, centrada en el álbum Sendas de Leyenda, combinó la energía del power metal con la mística del folk, logrando un equilibrio sonoro impecable.
Abrieron con “Intro”, "Profecía" y “Sueños de Cristal”, dos himnos que sumergieron al público en un viaje de ensueño. La respuesta fue inmediata: ovaciones, brazos en alto y rostros iluminados por la emoción. Un músico se debe a su público y los españoles de Celtian lo tienen más que claro cada vez que realizan un recital.
El violín y bouzouki de Borao, la flauta de Diego Palacio y los riffs de Sergio Culebras tejieron una atmósfera de fantasía y elegancia que recordó los grandes festivales europeos.
Entre tema y tema, la conexión entre Celtian y el público fue creciendo.
Diego y Txus demostraron su experiencia sobre los escenarios, con gestos de complicidad, sonrisas y momentos de auténtica comunión.
A su turno sonó "Hasta el Final" canción que cuando un ser humano cree desfallecer lo levantan del suelo y le muestran el poder de creer en que si hay fe todo es posible.
"Hace tiempo que la magia esconde
Un secreto ancestral
Una guerra en este mismo bosque
Por la esquiva libertad
Combatí junto a valientes héroes
Los seguí hasta el fin
Seres que lucharon por
Dictar su porvenir
Solo un deseo nos unió
Nuestro hogar con sangre proteger...."
El éxtasis del público era evidente con un arsenal digno de Celtian con himnos como: "Nueva Era", "Sendas de Leyenda" y "Tu Hechizo".
La ejecución de “Solsticio de Driade” alcanzó uno de los puntos más emotivos del show, seguida de una versión muy aplaudida de “Maleficios de Sangre” y "Lágrimas de Cera".
El final fue simplemente apoteósico: “El Hijo del Ayer”, "Serena" y “En Tierra de Hadas” cerraron un concierto que quedará grabado en la memoria colectiva de los presentes.
Xana, con su voz cristalina y poderosa, conquistó el escenario bogotano, mientras los músicos desplegaban precisión, fuerza y carisma.
El Ace of Spades fue testigo de una comunión mágica entre España y Colombia, entre lo ancestral y lo moderno, entre la fantasía y la realidad.
Arkhanon y Celtian demostraron que el metal no es solo música: es una forma de narrar el alma humana, de celebrar la historia y de mantener viva la llama del arte.
El público bogotano respondió con respeto, energía y devoción, comprendiendo que estaba ante una de esas noches irrepetibles que hacen historia en la escena del rock nacional.
Ambas bandas se marcharon con el corazón lleno, dejando tras de sí un eco de gratitud y promesa de reencuentro.
Salí del recinto pasada la medianoche, acompañado de la satisfacción que solo deja la música auténtica.
El eco de las guitarras aún flotaba en el aire y las voces de los asistentes seguían resonando: “¡Gracias Arkhanon! ¡Gracias Celtian!”.
La noche del 23 de octubre de 2025 fue una oda a la hermandad, al arte y a la magia del metal hecho con alma.
Fortín del Caballero celebra haber sido testigo y parte de esta experiencia, reafirmando que el rock —en todas sus formas— sigue siendo la fuerza espiritual que nos une, nos eleva y nos recuerda por qué seguimos amando la música con pasión infinita.
Ver galería de imágenes aquí:
(1) Galería Celtian en Bogotá. Fotografía por:... - Fortin del Caballero | Facebook
Aporte video: Hummingbird Press TV

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